Alemania arrasa y Owen se rompe

La selección alemana ha dado hoy buena cuenta de un Ecuador totalmente desdibujado respecto a sus dos primeros partidos. 3-0 en el marcador y una sensación de superioridad durante todo el partido aplastante. De hecho, los ecuatorianos no han tirado ni una sola vez entre los tres palos desde dentro del área (y en total, sólo dos veces). Parece ser que las bajas de Iván Hurtado, Segundo Castillo, Carlos Tenorio y Agustín Delgado les han mermado demasiado. Creo que estos cuatro tienen la plaza bien asegurada en el once inicial de octavos... unos octavos que le enfrentarán a Inglaterra.

Pero volviendo a Alemania, los anfitriones cada día se gustan más. Salen siempre a ganar los partidos, desde el minuto 1. Y te lo hacen saber. Fútbol directo, sin concesiones a la galería, como mandan los cánones históricos alemanes. Hoy maniataron como quisieron a Ecuador. Les dejaban tocar en su campo y en cuanto pasaban la divisoria... ¡zas! Presión asfixiante hasta que recuperaban el balón. Y otra vez hacia arriba. Juego fácil. Juego sencillo. Juego directo. Juego alemán. Juego efectivo. Sin necesidad de ser muy vistosos, pero con una tremenda eficacia. Y eso, en las eliminatorias, es lo que a la postre hace llegar lejos: la eficacia. De nada sirve lucirse cara a la galería si a la hora de la verdad no eres capaz de rematar la faena. Y en eso son expertos los alemanes. Ocho goles en estos tres primeros partidos, ganando todos sus partidos, algo que no lograban desde 1970. Empiezan a ganar (aún más) puntos en las apuestas.

En octavos se encontrarán con Suecia, que hoy ha mejorado bastante su imagen ante una Inglaterra que pierde a Owen para el resto del Mundial. El de Chester se rompió el ligamento cruzado de su rodilla izquierda a los dos minutos de partido y podría estar 4-5 meses de baja; está visto que éste no es su año...

Los ingleses, pese a ese contratiempo, salieron descaradamente a por el partido, y en la primera parte los suecos fueron un juguete en manos inglesas. Pero sólo fueron capaces de anotar un gol. O mejor dicho, un golazo. Probablemente, el mejor gol del Mundial. En la segunda parte todo cambió. La selección sueca se adueñó del partido por completo e Inglaterra sufrió una pájara monumental en los balones aéreos que le puede costar caro de sufrirla más adelante. Fue un partido eléctrico, con constantes idas y venidas, muy vistoso para el espectador. Y pese al gol de Gerrard en los últimos minutos, una nueva pájara en la defensa inglesa propició el empate de Larsson en el minuto 89. Y Suecia pasa como segunda mostrando un juego que no fue capaz de desplegar ante Paraguay. Inglaterra también ha mejorado mucho respecto a sus dos primeros partidos. Una buena noticia, sin duda. Una Inglaterra mejorada contra un Ecuador que volverá a ser (presumiblemente) el de las dos primeras jornadas... un partido tremendamente atractivo. Y una Alemania dispuesta a todo frente a una Suecia que vuelve a mostrar su mejor fútbol. Dos apasionantes partidos para abrir boca en la ronda de octavos a partir del sábado.