jueves, 8 de junio de 2006

Luis llega invicto al Mundial

Luis ya lleva 23 partidos invicto desde que cogió la manija de la selección (es decir, todos los que ha dirigido). Hoy se ganó a toda una selección mundialista como Croacia, y además remontando, lo que da más moral a un grupo de jugadores que, desde hace mucho tiempo, no va con la vitola de súper-favoritos para ganar el Mundial.

El equipo tiene garra, tiene lucha, sabe tener la posesión sin desesperarse, y sabe no perder la cara al encuentro; pero por segundo partido consecutivo, en defensa no estuvimos al nivel deseado. No debemos temer por la portería, ya que tanto Reina como Cañizares demostraron que están más que preparados para suplir a Iker en cualquier momento, pero los centrales no están al mismo nivel que ante Rusia, o al menos eso parece. Les ganaron la espalda en varias ocasiones y esos fallos, en un Mundial, se pagan. Arriba, a Villa le puede su ansia por marcar (algo parecido a lo que le pasaba a Torres en sus inicios con la selección) y los extremos (sobre todo Joaquín) siguen siendo muy irregulares... parece que la opción del 4-4-2 con extremos no va a triunfar sobre la 4-3-3.

España empezó el partido eléctrica, y en el primer minuto Joaquín pudo poner por delante a los nuestros con un cabezazo que se marchó fuera cuando las gradas (semi vacías, aunque con unos 10.000 aficionados españoles) ya cantaban gol. Sin embargo, este dominio inicial se fue diluyendo y los croatas empezaron a pisar el área de Reina, hasta que un centro desde la derecha fue introducido en su propia portería por Antonio López, que arrastró durante 10 minutos el lastre de ese auto-gol. Incluso llegaron a anotar un segundo gol, pero en esta ocasión fue fuera de juego. España volvió a manejar el control de la bola y tuvo el empate en varias oportunidades, la más clara en manos de Villa, que envió un balón a la madera. Más tarde Xavi, en un tiro desde la frontal que intentó desviar de tacón Raúl, y Reyes, cuyo tiro salió rozando la escuadra, trataron de nivel el marcador, pero al descanso la selección llegó por detrás en el marcador.

La segunda mitad se inició con el carrusel de cambios esperado: Sergio Ramos, Luis García, Fernando Torres y Cañizares por Salgado, Reyes, Raúl (desaparecido durante los 45 minutos) y Reina. Estos cambios se fueron notando en el juego del equipo, que fue ganando profundidad a medida que avanzaban los minutos. Parte de culpa de ese avance español lo tuvo el debutante Pernía quien, una vez superados los nervios del debut, se hizo dueño y señor de su banda y no paró de subirla casi como un extremo. Suyo fue el gol del empate, en una falta desde la fronta que tocó en la barrera y despistó a Pletikosa. Más tarde, Torres lanzaría bastante mal un penalty y el propio Pletikosa lo desvió, salvando a continuación el remate de Luis García. Es el sino de España, sufrir. Y para sufrir más, Cañizares hizo la parada de la noche tras sacar un disparo de Bosnjak pegadito al palo. Y al final, en una contra, Torres realizó un jugadón individual (con un regate se fue de dos) que le permitió anotar el 2-1 y la victoria para España.

No ha sido un partido perfecto, siguen habiendo fallos, pero es mejor llegar al Mundial remontándole a otra selección mundialista que hablando de una derrota tras atacar y atacar y atacar. El próximo miércoles, ante Ucrania, ya será en serio... ojalá Luis siga con su racha (la mejor de entre todas las selecciones) y lleguemos lejos.

[ Foto: Marca.com ]

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